Mauricio Salcedo (1993, Bogotá, Colombia) es un artista que surge de la periferia de la ciudad, enclave donde confluyen social y culturalmente diferentes estratos económicos: desde los marginales hasta los de clase social media y alta en la topografía de la capital colombiana. Como tantos emplazamientos urbanos, que emergen a través del crecimiento informal, son el resultado generacional del éxodo rural forzado por la violencia. Salcedo ha sido testigo de la transformación metamórfica de su entorno. De esta, surge una afectividad hacia los espacios físicos, que genera la necesidad de expansión, no solo como una necesidad de su núcleo familiar, sino también de todos aquellos que integran su comunidad. Esta misma dinámica nuclear y colaborativa, la reproduce de manera laboriosa en el trabajo comunitario sobre el cual se cimenta el desarrollo actual de su obra.
Percepciones Espaciales : Mauricio Salcedo
Pasadas exhibition
En palabras del propio Salcedo, su narrativa se entrelaza con la añoranza “de tradición familiar y comunitaria, de cooperación y asistencia”, aquella que se generó cuando las necesidades habitacionales de su entorno se conjugaron con la colaboración vecinal que creó las construcciones que ahora habitan. Pero más allá de la intención que cada una de ellas lleva, es importante enfatizar que deposita la responsabilidad de su interpretación en los hombros de quien las contempla, lejos de la inmediata observación, de la crítica política y social, que podrían someramente despertar o críticamente someterse.
En su serie Arquitecturas Adosadas, se leen mensajes que trascienden los confines de su concepción y realización marginal. Estás descubren y ocupan espacios a los que no se les permitiría ingresar de no ser por su concepción artística, convirtiéndolas en testigos mudos de su lugar de inspiración y origen. Sus Arquitecturas Adosadas van más allá de ser solo estructuras constructivas que se transforman en objetos escultóricos, conllevan una carga simbólica imposible de ignorar. Ellas existen sutilmente entre el espacio que las inspira y como arte.
Su obra más reciente, hasta hoy inédita y enfocada en la impresión gráfica: el gofrado y el grabado, es posible gracias a sus estudios realizados bajo el tutelaje del maestro Umberto Giangrandi. En 2020, comenzó a vincular la disciplina de la producción gráfica con su escultura. En cada una de sus impresiones es evidente la continuidad de la investigación visual de su entorno. Salcedo y su equipo convierten el espacio de trabajo en un laboratorio de investigación social y artística con resultados sorprendentes. A través de sus policromías gráficas y las diferentes densidades matéricas que alcanzan con la aplicación del gofrado, han logrado imágenes compositivas que trascienden la convencionalidad prevalente en la región, brindando una narrativa que va más allá de la destreza, el esfuerzo colaborativo, y la atención detallada de su ejecución.
En palabras de Salcedo, su obra buscará siempre una continuidad; su inquietud seguirá reposando en la investigación de la forma hasta lograr alcanzar formas etéreas. De lo que no es consciente aún, es que dicha “eterealidad” vive inevitablemente en todos aquellos que hemos sido tocados por su obra.
-Francisco Arévalo
